¿Y si la industria de Gestión de Activos pudiera innovar tan rápido como Netflix?
Una nueva era de innovación en la gestión de activos, impulsada por una transformación digital en la administración de fondos
Vivimos en un mundo digital donde nuestra vida diaria se ha visto afectada por la revolución digital. Tomemos la transmisión de video como ejemplo: ahora tenemos una gran variedad de programas de TV y películas a pedido para transmitir cuando queramos, y damos por sentado que las plataformas de transmisión de video como Netflix siguen el ritmo de nuestras demandas como consumidores.
La razón por la que los líderes tecnológicos como Netflix se han convertido en una parte tan omnipresente de nuestras vidas es su capacidad para innovar constantemente en su oferta y mejorar la experiencia del cliente. Lo que los distingue es la velocidad a la que pueden presentar continuamente nuevos productos y funcionalidades, sin interrumpir su servicio.
Ahora compare este modelo con la industria de gestión de activos: actualmente, los gestores de activos y sus administradores de fondos pueden tardar semanas o incluso meses en implementar un nuevo código para respaldar el lanzamiento de un nuevo producto o alinearse con las nuevas regulaciones. Las plataformas como Netflix están haciendo esto continuamente, con sus ingenieros implementando código cientos de veces al día, maximizando su agilidad y acelerando la innovación.
Pero todo esto está a punto de cambiar, y ahora estamos en la cúspide de una nueva era de innovación en la industria de gestión de activos que será impulsada por una transformación digital en la administración de fondos.
Una nueva era de innovación en la gestión de activos
A medida que la tecnología ha transformado la forma en que vemos la televisión, ahora nos encontramos en el umbral de una nueva fase en la gestión de activos, donde las plataformas de tecnología abierta permitirán un aumento masivo en el ritmo al que se pueden implementar el cambio y la innovación. Esto ya está sucediendo en el mundo de la banca y revolucionará la forma en que se implementa la tecnología en la administración de fondos.
La gestión de activos lleva demasiado tiempo a la zaga de otros sectores de servicios financieros, pero esto está cambiando ahora. En una encuesta en septiembre pasado, descubrimos que la inversión en nueva tecnología y transformación digital es ahora el enfoque número uno en la gestión de activos, y el 38% de los encuestados dijo que será el mayor enfoque de su empresa durante los próximos 12 meses.
En el centro de esta transformación digital se encuentra un alejamiento de los sistemas monolíticos, internos o legados que requieren largos ciclos de desarrollo y actualización, a una arquitectura moderna que permite metodologías mucho más ágiles en las que los cambios se pueden desarrollar, integrar y movilizar continuamente en las operaciones.
Los crecientes costos de implementar y mantener complejos sistemas legados internos, junto con la necesidad de mantenerse al día con las expectativas de los consumidores, ya han llevado a los bancos a demandar cada vez más soluciones innovadoras, flexibles y rentables. Ahora estamos a punto de ver una adopción mucho más amplia de este enfoque en la gestión de activos.
Un elemento clave para esto es el cambio hacia la tecnología nativa de la nube, que permitirá a los administradores de fondos escalar sus negocios de manera rápida y elástica, mientras que al mismo tiempo ofrece un menor costo de propiedad, tiempos de respuesta más rápidos y un mejor acceso a los datos. Los beneficios de convertirse en nativo de la nube son significativos, ya que generan hasta diez veces más en ahorros de infraestructura y más de 100 veces en respuestas más rápidas.
La liberación de migraciones de TI complejas también se está transformando con los administradores de fondos que ahora adoptan la arquitectura de microservicios, que construye y entrega proyectos de TI como una serie de componentes pequeños e independientes. Cada componente tiene un propósito único y específico y encaja con otros componentes, como bloques de construcción, para crear el proyecto más grande. Esto representa un alejamiento de las actualizaciones de TI rígidas y monolíticas a una en la que los componentes individuales se pueden reemplazar o actualizar “bloque por bloque”, brindando un retorno de la inversión tangible en cada paso.
Otra tecnología clave que impulsará esta nueva fase de transformación digital es la adopción por parte de la industria de gestión de activos de interfaces de programación de aplicaciones (API), que proporcionan una ‘puerta de enlace’ para que un proveedor de servicios pueda proporcionar acceso a datos o servicios para un usuario externo o a un proveedor tercerizado.
Tome a Uber como ejemplo: Uber integra los servicios de mapas y ubicación de Google con los servicios de pago de las compañías de tarjetas a través de API, y luego utiliza APIs adicionales para conectar a los conductores con los pasajeros. En el mundo de la banca, las APIs ya son una tecnología probada y comprobada y han transformado la forma en que las empresas pueden brindar servicios a sus clientes.
La adopción de APsI abiertas permitirá a la industria de gestión de activos conectarse con un ecosistema más amplio de proveedores de tecnología financiera y no financiera, y aprovechar sus aplicaciones e innovaciones para llevar nuevos productos y funciones al mercado más rápido. La compatibilidad está estandarizada para que la colaboración con esta comunidad más amplia de desarrolladores de aplicaciones sea más rápida, fácil y de menor riesgo.
Un área que cambiará las reglas del juego para la gestión de activos será la Inteligencia Artificial Explicable. Proporcionará una mayor transparencia y explicabilidad de las decisiones y recomendaciones automatizadas de IA, aprovechando el poder de la tecnología de IA para automatizar los procesos manuales y crear experiencias de usuario fluidas. Al mismo tiempo, la IA Explicable ayudará al cumplimiento regulatorio al proporcionar una huella de auditoría clara para los auditores.
Todos estos cambios en la tecnología moderna serán transformadores para la industria de gestión de activos. En un futuro cercano, los administradores de fondos podrán alejarse de los rígidos calendarios de lanzamiento y los ciclos de producción lentos, para introducir múltiples cambios en respuesta a las solicitudes o regulaciones de los clientes en cuestión de horas, y respaldar el lanzamiento de nuevos productos en días en lugar de semanas.
Pero esta transformación requerirá un replanteamiento fundamental de cómo los administradores de fondos aprovechan la tecnología. Anteriormente, el enfoque principal se había centrado en los costos y la eficiencia. Pero ahora la pregunta clave que los administradores de fondos deben comenzar a hacerse es “¿cómo podré competir con aquellos que pueden ofrecer la agilidad y la innovación de Netflix?”.